Puede que no te des cuenta, pero sabes que yo me fijo en todos los detalles. Hasta en los más insignificantes, aunque para mí no lo sean. Y uno de esos insignificantemente significantes detalles es tu sonrisa. Pero no tu sonrisa corriente. No. Esa sonrisa que solo veo cuando estás conmigo. Cuando estamos a 2 centímetros. Cuando me acaricias la mejilla con tu delicada mano y aparece esa sonrisa ligeramente de lado, esa que me vuelve loca. Sí. Sin duda esa sonrisa me encanta, porque lo haces inconscientemente, porque lo haces conmigo. Solo conmigo.
Puede que hasta ahora sea la única que se ha fijado en esos pequeños detalles, esos que me resultan tan.. impredecibles. Pero es que me encanta buscar cada día algo nuevo en ti, algo en lo que no me había fijado hasta ese día.; un lunar escondido, una nueva cicatriz con una antigua historia...
Todavía existen un millón de cosas que me gustaría descubrir, que me encantaría hacer contigo. Así que, por favor, PROMÉTEME más momentos infinitos.
