JUNTOS PERO NO REVUELTOS.

martes, 13 de agosto de 2013

Excuse me first love.

Sin duda, el primer amor es el más intenso. Es un amor verdadero, pero el menos completo de todos. Es del que más aprendes, ya que cometes todos los errores que se pueden llegar a cometer. Es un amor que te absorbe, que te llena el alma; incluso te hace sentir tanta felicidad que podrías morir en paz en ese mismo instante. El primero es un amor loco, ingenuo, iluso; y es que pensamos que es un amor para siempre, pero para siempre es mucho tiempo. 

Antoine de Saint-Exupery dijo que al primer amor se le quiere más, a lo demás se les quiere mejor. Y es cierto, con el primero aprendemos a amar, aprendemos de los errores, y también de las alegrías. Tú fuiste mi primer amor, y te amé mucho, más de lo que creía que se podía querer a una persona. Pero ahora, ahora... Ahora toca querer mejor.

Nueva vida.

Aprender a meditar

Ser puntual

Leer un libro mensual

Tomar dos litros de agua diaria

Dormir antes de las 2 A.M.

Deporte diario

martes, 26 de marzo de 2013

sábado, 23 de marzo de 2013

Noche de sábado.

Subió el volumen de la música y recorrió el pasillo desnuda pensando en él; en qué haría cuando sus enormes ojos grises la miraran. Quería estar guapa para él, quería gustarle. Se puso su mejor vestido, con sus mejores tacones, incluso pintó sus labios de color carmín. Cogió su collar de diamantes, pero inmediatamente lo dejó en el aterciopelado estuche. En las películas los hombres solo regalan collares de Tiffany's a aquellas mujeres que no los llevan puestos. Se recogió el pelo y preparó su bolso. Los minutos pasaban y él no llegaba. Como cada noche. Pero cada noche, ella tenía la esperanza de que él llamaría a la puerta con un enorme ramo de rosas. Sí, quería estar guapa para él, quería gustarle. Pero él nunca llegó.

viernes, 15 de febrero de 2013

Despierta, pequeña.

Era una sensación extraña, como si hubieras estado durante meses y meses dormida, y de repente despertaras y entonces, vieras cómo han cambiado las cosas. No sé cómo pasó. Solo me levanté un día y lo supe, lo vi todo claro. Todas esas semanas de no saber qué decir, de no saber lo que realmente quería hacer, de no saber qué pasaba; empezaron a cobrar sentido. Me levanté feliz, hacía mucho que no sonreía, mucho. Ni si quiera una sonrisa falsa de esas con las que intentas transmitir un "Estoy bien" cuando en el fondo sabes que no lo estás.  Pero esa mañana, ya no era ese tipo de sonrisa, ahora era algo así como "Estoy segura de lo que quiero hacer".