Sin duda. Eres de las mejores cosas que me han pasado. Y sí, sé que soy muy joven todavía para decir eso, y que me quedan muchas "mejores cosas" por pasar. Pero aún sí, tengo razones para decirlo. Porque eres tan.. tan.. tú. Tan casi perfecto. Digo "casi" porque tienes tus fallitos, todo el mundo los tiene. Pero he llegado a un punto en el que me importan tan poco que ya ni los veo. A lo mejor a eso se refieren cuando dicen que "Cuando estás enamorada ves perfecta a la otra persona, no encuentras ningún defecto". No es que no encuentres ningún defecto, es que te dan igual. Los aceptas. Aceptas a la otra persona tal y como es, porque la quieres, y por tanto quieres todo lo que va con ella. Cada manía, cada defecto, cada imperfección, pero también cada virtud, cada capacidad. Todo. Y yo te quiero, no te haces una idea de lo que te quiero. Y eso que somos tan diferentes. Tan tan diferentes. Ya sabéis, como agua y aceite. Pero creo que eso es lo que hace más especial nuestra relación. Nos complementamos, uno aporta al otro lo que le falta a éste. Y tú me aportas muchas cosas. Muchas. Pero sobre todo, ese amor que me faltaba. Ese que necesitaba. Ese que buscaba, y encontré por casualidad en tu sonrisa. Tú dijiste "somos tal para cual" y yo me reí. Pero ahora sé que es así. Llevamos más de un año aguantándonos. Y casi un año besándonos. Y a estas alturas, soy adicta a ti. A aguantarte, a besarte. Como tú dices, "Me he acostumbrado a tenerte a mi lado. Esto ha pasado de ser algo bueno a ser algo
Así que sí, para mí, eres una impresionante persona. Por cómo eres, y por cómo eres conmigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
gotas de agua